La crisis humanitaria en Gaza se agrava cada día. El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió este miércoles 23 de julio que gran parte de la población en Gaza está muriendo de hambre. Según sus palabras, lo que ocurre en el enclave palestino “no puede llamarse de otra forma”, y enfatizó que esta situación “es causada por el hombre”.
Durante una rueda de prensa en Ginebra
Tedros denunció que el suministro de alimentos hacia Gaza está muy por debajo de lo necesario, a pesar de que el gobierno de Israel alivió ligeramente el bloqueo en mayo tras más de dos meses de restricciones. Sin embargo, la escasez de comida, medicinas y otros recursos esenciales sigue siendo extrema.
La declaración del titular de la OMS se suma a la de 111 organizaciones de ayuda humanitaria y derechos humanos —entre ellas, Médicos Sin Fronteras y Oxfam— que alertaron en un comunicado conjunto sobre una “hambruna masiva” que avanza rápidamente en la región. “Nuestros colegas y las personas a las que atendemos están consumiéndose”, advierten.
Más de 2,1 millones de personas atrapadas en Gaza enfrentan no solo los riesgos de la guerra, sino también los efectos devastadores del hambre. “Estamos presenciando un aumento letal de muertes vinculadas a la desnutrición”, señaló Tedros. La OMS ha detectado que más del 10% de la población infantil sufre desnutrición aguda y que más del 20% de las mujeres embarazadas o lactantes analizadas presentan cuadros de desnutrición, muchos de ellos severos.
Desde principios de 2025, la OMS ha confirmado al menos 21 muertes de menores de cinco años por causas relacionadas con la desnutrición, aunque aclaran que la cifra real podría ser mucho mayor.
La organización ha vuelto a hacer un llamado urgente por un cese al fuego total, acceso humanitario sin restricciones y una solución política duradera al conflicto. Mientras tanto, miles de vidas continúan en peligro.