Este sábado (18 de octubre de 2025), miles de personas tomaron las calles de todo Estados Unidos bajo el lema “No a los reyes”, en rechazo a las políticas autoritarias del presidente Donald Trump. Desde Nueva York hasta San Francisco, el país vivió una de las mayores movilizaciones ciudadanas desde su regreso a la Casa Blanca.
El movimiento “No Kings”, conformado por más de 300 organizaciones, acusa al mandatario de actuar como un monarca moderno. “El presidente cree que su poder es absoluto. Pero en Estados Unidos no tenemos reyes”, afirma el colectivo en su sitio oficial. Más de 2.700 marchas se desarrollaron simultáneamente, incluso cerca de la residencia de Trump en Mar-a-Lago, Florida.
En Nueva York, miles de manifestantes marcharon por Broadway con pancartas que decían “Las reinas dicen no a los reyes” y “Queremos recuperar Estados Unidos”. Una de las asistentes, Nadja Rutkowski, recordó con preocupación su infancia en Alemania: “Lo que veo aquí me recuerda a 1938. La gente está siendo secuestrada en las calles. Tenemos que levantarnos”.
La jornada se desarrolló con un ambiente de resistencia pacífica y un espíritu festivo. Hubo música, discursos y una gran pancarta con el preámbulo de la Constitución: “Nosotros, el pueblo”, que fue firmada por los asistentes como símbolo de unidad nacional.
Trump reaccionó de manera moderada, aunque su equipo difundió un polémico video generado por IA donde aparece con una corona y vestiduras reales. Sus críticos lo acusan de socavar la democracia y abusar del poder.
Figuras como el actor Robert De Niro se sumaron a las protestas, llamando a defender la libertad con firmeza:
“Nos estamos levantando nuevamente, de forma pacífica pero contundente, para decirle al mundo: No a los reyes”.
La movilización, la tercera desde su retorno al poder, ocurre en medio del cierre parcial del Gobierno y una creciente tensión entre el Ejecutivo, el Congreso y los tribunales, poniendo a prueba —una vez más— el equilibrio de poder en la nación norteamericana.
