En lo que va del martes, el Ejército israelí mató al menos a 43 gazatíes, según fuentes médicas. Esto ocurrió como resultado de bombardeos concentrados en la ciudad de Gaza, en el norte del enclave, donde también murieron varios niños.
Entre los fallecidos se encuentran tres menores de edad. Además, cinco palestinos perdieron la vida esta tarde cuando aviones de guerra atacaron a un grupo de personas cerca de una mezquita en el barrio de Zeitún, en Ciudad de Gaza, confirmaron fuentes médicas citadas por la agencia oficial de noticias palestina WAFA.
Al menos otras 14 personas murieron y 25 más resultaron gravemente heridas tras un bombardeo israelí contra tiendas de campaña que albergaban a desplazados en el campamento de refugiados de Al Shati, al oeste de la ciudad.
Tres gazatíes más fueron asesinados en ataques contra el centro de Jan Yunis, en el sur, mientras que un bombardeo contra un edificio residencial cobró la vida de dos hermanos en el campamento de refugiados de Bureij, en el centro de Gaza, según fuentes locales.
En Rafah, dos palestinos murieron y decenas resultaron heridos por disparos de las fuerzas israelíes cerca de un punto de distribución de ayuda, elevando a siete el número de gazatíes muertos este martes mientras intentaban conseguir alimentos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.
Desde octubre de 2023, más de 59,100 palestinos han muerto a causa del fuego israelí, de acuerdo con ese ministerio. Sin embargo, se estima que esta cifra es conservadora.
Este registro no incluye miles de muertes indirectas por enfermedades, desnutrición —ya hay más de un centenar confirmadas, en su mayoría niños— o por la falta de asistencia médica derivada del bloqueo israelí que impide el ingreso de suministros humanitarios.