Un fuerte terremoto de magnitud 7.4 estremeció la mañana de este viernes el sureste de la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, provocando alarma entre la población y la activación inmediata de una alerta de tsunami en las zonas costeras.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el movimiento telúrico ocurrió a 58 kilómetros de profundidad, con epicentro a unos 20 kilómetros al este de la localidad de Santiago. El sismo se registró alrededor de las 09:43 horas locales (01:43 GMT) y se sintió con fuerza en varias ciudades del país insular.
Las autoridades filipinas instaron a los habitantes de las regiones costeras del centro y sur del país a evacuar hacia terrenos más altos, ante la posibilidad de que se generen olas peligrosas. Hasta el momento, los organismos de emergencia mantienen vigilancia constante sobre las zonas más vulnerables.
Este nuevo movimiento ocurre solo diez días después del fuerte sismo de magnitud 6.9 que sacudió la isla de Cebú el pasado 30 de septiembre, dejando un saldo de 74 personas fallecidas y cuantiosos daños materiales.
Filipinas se encuentra ubicada sobre el Anillo de Fuego del Pacífico, una de las regiones con mayor actividad sísmica y volcánica del mundo. Cada año, el país experimenta cerca de 7,000 terremotos, la mayoría de ellos de intensidad moderada, aunque algunos, como el de este viernes, recuerdan la vulnerabilidad constante de esta nación ante los embates de la naturaleza.
Las autoridades locales continúan monitoreando la situación y piden a la población mantener la calma y atender las recomendaciones oficiales mientras se evalúan los posibles daños y réplicas.