En un acto de oportunismo político, Mario Figueroa, el actual alcalde de Taxco y aliado del candidato Mario Moreno Arcos, está capitalizando la muerte de la menor “Camila” para obtener beneficios para su candidato. Figueroa ha aceptado entrevistas locales y nacionales, utilizando la tragedia para desviar la responsabilidad del gobierno federal y estatal en materia de seguridad, mientras evita reconocer su propia falta de acción como alcalde.
En Taxco, los ciudadanos expresan su descontento con Mario Figueroa, quien ha fracasado en su compromiso de garantizar la seguridad en la ciudad debido a sus supuestos vínculos con miembros del crimen organizado. La reciente detención de los presuntos responsables del crimen de “Camila” terminó en un caos debido a la falta de control por parte de las autoridades locales, revelando la alarmante falta de seguridad en un municipio que solía ser conocido como “Pueblo Mágico” y que ahora se ha ganado el título de “Pueblo Trágico”.
Es conocido públicamente que el secretario de seguridad pública de Taxco, Doroteo Eugenio Vázquez, culpó a la madre de “Camila” por la tragedia, en lugar de asumir la responsabilidad como autoridades primeras en responder al incidente. Esta falta de acción y el manejo negligente de la situación reflejan el desinterés de Mario Figueroa por la seguridad de Taxco.
Además, se ha revelado la constante ausencia de Mario Figueroa en las reuniones de la Mesa Regional de Coordinación para la Construcción de La Paz, donde se coordinan los esfuerzos para mejorar la seguridad en la región. Sus declaraciones contradictorias respecto al apoyo del gobierno federal y estatal contrastan con la realidad de estas reuniones, donde se demuestra el apoyo y la colaboración hacia las autoridades locales.