El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantuvieron este miércoles una intensa conversación telefónica de 50 minutos, marcada por la tensión debido a la reciente imposición de aranceles por parte del gobierno estadounidense.
Disputa por los aranceles y el fentanilo
Fuentes gubernamentales confirmaron que la discusión giró en torno a la guerra comercial entre ambos países, impulsada por los aranceles de Washington. Además, Trump exigió a Canadá mayores esfuerzos para frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos.
Según medios canadienses, en la llamada también participaron el vicepresidente estadounidense, JD Vance, y el secretario de Comercio, Howard Lutnick. Trump propuso exenciones arancelarias para ciertos sectores, pero Trudeau se negó a ceder mientras no se retiraran todas las tarifas impuestas el martes.
Trump presiona, Canadá resiste
La negativa del primer ministro canadiense provocó una acalorada discusión en la que Trump expresó nuevas quejas sobre las políticas comerciales de Canadá, en particular sobre las protecciones al sector agrícola.
Tras la llamada, el ministro de Finanzas de Canadá, Dominic LeBlanc, sostuvo varias conversaciones con Lutnick en un intento por reducir las tensiones.
Trump se pronuncia en redes
En su plataforma Truth Social, Trump reveló detalles de la conversación y criticó a Trudeau por no haber hecho lo suficiente para evitar los aranceles.
“Él dijo que la situación ha mejorado, pero yo le dije: Eso no es suficiente”, escribió el mandatario estadounidense.
Impacto en el T-MEC y relación con México
La conversación entre Trudeau y Trump ocurre en un momento crítico, un día después de que Estados Unidos impusiera un arancel del 25 % a productos de Canadá y México, pese a la vigencia del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Fuentes cercanas al gobierno canadiense indicaron que Trudeau planea comunicarse con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, para coordinar una estrategia común frente a las medidas de Trump.
Este conflicto comercial podría afectar la estabilidad del T-MEC y generar nuevas tensiones en la relación trilateral de América del Norte.