Este jueves (04.12.2025), los líderes de Ruanda y la República Democrática del Congo firmaron en Washington un acuerdo de paz acompañados por el presidente Donald Trump, aun cuando en el terreno los combates continuaban.
“Creo que va a ser un gran milagro”, dijo Trump tras la firma, en la que participaron Paul Kagame, presidente de Ruanda, y Félix Tshisekedi, mandatario congoleño. El presidente estadounidense también anunció acuerdos relacionados con minerales críticos, señalando que Estados Unidos busca fortalecer su participación en esa región.
La ceremonia tuvo lugar en un instituto de paz que la administración de Trump acaba de renombrar en su honor. Con su estilo característico, el mandatario comentó sobre los dos líderes africanos: “Pasaron mucho tiempo matándose entre ellos, y ahora van a pasar mucho tiempo abrazándose, tomándose de las manos y aprovechándose económicamente de Estados Unidos, como lo hacen los demás países”.
Un acuerdo con cautela y tensiones activas
A diferencia del tono triunfalista de Trump, Kagame y Tshisekedi fueron más reservados. En el este de la RDC los enfrentamientos continúan, especialmente con el avance del grupo armado M23, el cual, según Naciones Unidas, recibe apoyo de Ruanda.
“Habrá altibajos en el camino por delante, no hay duda de ello”, reconoció Kagame, mientras que Tshisekedi calificó el acuerdo como “el comienzo de un nuevo camino, un camino exigente”.
Trump, por su parte, ha presumido que el conflicto en el este del Congo —responsable de cientos de miles de muertes durante décadas— es una de las ocho guerras que asegura haber terminado desde que regresó al cargo en enero. El republicano tampoco ha ocultado su deseo de obtener el premio Nobel de la Paz.
Minerales estratégicos en el centro del acuerdo
El presidente estadounidense afirmó que este pacto facilitará el acceso de Estados Unidos a minerales críticos presentes en ambos países. El este de la RDC, una región marcada por la violencia, concentra algunos de los recursos minerales más importantes para tecnologías modernas, especialmente para la industria de autos eléctricos.
Este acuerdo se suma a otros impulsados por Trump en los que ha buscado incluir a empresas estadounidenses en la extracción de minerales raros, como ya ha hecho en Ucrania.
“Vamos a sacar algunos de los minerales raros”, dijo Trump. “Y todos vamos a ganar mucho dinero”, concluyó.
