Las lluvias torrenciales que han azotado Chad desde julio de 2024 han provocado la muerte de al menos 341 personas y afectado a más de 1.5 millones, según un informe reciente de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), publicado el 9 de septiembre.
Afectaciones Extensas en las Provincias y Pérdidas Masivas
Las 23 provincias del país han sido impactadas por las inundaciones, un fenómeno cada vez más frecuente en los últimos años. Según el reporte, más de 164,000 hogares han sido destruidos, lo que ha dejado a miles de familias sin refugio. Además, las inundaciones arrasaron con 259,000 hectáreas de cultivos, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria de millones de personas. Las pérdidas también incluyen 66,700 cabezas de ganado, un golpe devastador para las comunidades que dependen de la agricultura y la ganadería para subsistir.
Crisis Climática y Respuesta Humanitaria
La ONU ha hecho un llamado urgente para actuar ante esta crisis climática, que afecta gravemente a Chad y otras regiones de África. En Sudán del Sur, las inundaciones también han causado estragos, afectando a más de 700,000 personas. Este fenómeno resalta la necesidad de más recursos y financiamiento para mitigar los efectos del cambio climático en la región.
Incremento Rápido en el Número de Damnificados
En cuestión de una semana, el número de personas afectadas en Chad ha crecido de 960,000 a 1.5 millones. Esta rápida escalada evidencia la magnitud de la crisis. La OCHA advirtió que la situación continúa deteriorándose, y el gobierno de Chad ha formado un comité interministerial para coordinar los esfuerzos de ayuda.
Desafíos Futuras y Llamado a la Acción
La población afectada necesita urgentemente asistencia humanitaria, como alimentos, refugio y atención médica. El acceso a áreas remotas sigue siendo un desafío debido a las infraestructuras dañadas, complicando los esfuerzos de respuesta.
