Dominica se encamina hacia un hito en su camino hacia la independencia energética a través de fuentes renovables, destacando su enfoque en la energía geotérmica. Este pequeño país en el Caribe oriental está cada vez más cerca de producir electricidad de manera completamente renovable, lo que no solo promueve la sostenibilidad ambiental, sino que también reduce los costos de energía.
Como uno de los primeros pequeños Estados Insulares en desarrollo (PEID) en tomar medidas significativas hacia la eliminación de los combustibles fósiles para la generación de energía, Dominica está liderando el camino hacia un futuro más limpio y sostenible.
A diferencia de muchos de sus homólogos, que dependen en gran medida de la importación de combustibles fósiles, esta isla cuenta con una poderosa fuente de energía limpia bajo su valle de Roseau.
La energía geotérmica, una alternativa estable y renovable, se está convirtiendo en el centro de atención en Dominica. Aprovechando el calor subterráneo de la Tierra a través de perforaciones profundas, este país volcánico está en una posición privilegiada para generar electricidad de manera eficiente y sostenible.
Con el respaldo de décadas de investigación y financiamiento internacional, Dominica ha logrado avanzar en su ambicioso proyecto de energía geotérmica. La construcción de pozos de prueba confirmó la viabilidad comercial de esta fuente de energía, lo que ha allanado el camino para la producción comercial de electricidad y la posible exportación de excedentes a islas vecinas como Martinica y Guadalupe.
Este logro representa más que una simple transición hacia una fuente de energía más limpia; es un paso hacia adelante para la economía del país. Se espera que la electricidad más asequible impulse el crecimiento económico y genere ingresos adicionales a través de la exportación de energía. Con la energía geotérmica como columna vertebral de su futuro energético, Dominica está sentando las bases para un futuro más sostenible y próspero.