El Parque Nacional El Veladero y la zona alta de El Mirador se han convertido en los principales sitios de inhumación clandestina en Acapulco, según denuncian colectivos de búsqueda de personas desaparecidas. A pesar de hallazgos previos, estos lugares continúan siendo utilizados por el crimen organizado para ocultar a sus víctimas, consolidando a la ciudad como un punto crítico de esta crisis en México.
Crece la crisis de desapariciones en Acapulco
La problemática de desapariciones en Acapulco se ha agravado en la última década, afectando principalmente a jóvenes y mujeres. Según activistas, muchas de ellas desaparecen desde los 14 años y no regresan a sus hogares.
Las primeras fosas clandestinas en la ciudad aparecieron en 2007 en zonas rurales y colonias marginadas. Sin embargo, tras la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014, se descubrieron más fosas en Guerrero, incluyendo Cayaco, Renacimiento y áreas cercanas a la Autopista del Sol.
Patricia Retana Ahuejote, integrante de la Colectiva “Fe y Esperanza de Encontrarles Guerrero”, denunció que lugares como El Mirador han sido convertidos en fosas comunes recurrentes:
“Las autoridades han investigado estas zonas, pero los delincuentes las siguen utilizando”, señaló en entrevista.
Por su parte, Elba Janet Galeana Campo, de la Asociación de Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos, afirmó que la mayor fosa clandestina de la ciudad es El Veladero:
“Todo el mundo sabe que el Parque El Veladero es la mayor fosa clandestina de Acapulco. Supera a todas las que tenemos detectadas”, indicó.
Crimen organizado y fosas comunes
Un informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) de 2021 reveló que en panteones públicos de Acapulco y el Valle de México hay fosas comunes utilizadas por el crimen organizado. De los 4,910 cadáveres no identificados en el país, 1,050 se encuentran en morgues del puerto.
Aunque las autoridades han identificado varias zonas críticas, colectivos de búsqueda advierten que el problema sigue creciendo. Además de El Veladero y El Mirador, han detectado restos humanos en Cayaco, Tuncingo y otras áreas de Acapulco, evidenciando la magnitud de la crisis de desapariciones en la región.