Lectura Política por Noé Mondragón Norato
El exgobernador priista Héctor Astudillo, actual propietario de Movimiento Ciudadano (MC) en Guerrero, traza un camino claro: posicionar a su hijo, Ricardo Astudillo Calvo, en la contienda por la gubernatura de 2027, abanderado por MC. Astudillo busca crear alianzas políticas estratégicas, aunque eso no garantice su triunfo en las urnas.
MC: Aplastar al PRI
Héctor Astudillo, conocido por su carácter rencoroso, planea vengarse de sus antiguos adversarios priistas, Alejandro Moreno “Alito” y Manuel Añorve Baños. Astudillo utilizó a Mario Moreno como un peón desde la elección de 2021, negándole finalmente la dirigencia de MC. Ahora, favorece a Gabriela Bernal Reséndiz, alguien más controlable.
En los números fríos de la pasada elección, MC superó al PRI en votos para senador. Añorve, quien ganó gracias al PRD, no cuenta con el apoyo absoluto del PRI. Astudillo busca consolidar a MC como la segunda fuerza política en Guerrero, tras Morena.
Astudillo y la Nueva Estrategia de MC
Astudillo busca ventaja frente a Añorve alineándose con la política nacional de MC. Planea promover a mujeres y jóvenes, aunque sean figuras ya maleadas por prácticas priistas. Gabriela Bernal y Ricardo Astudillo, junto a Erika Lürhs Cortés, son ejemplos de esta estrategia, aunque sus trayectorias no inspiren confianza. La pregunta es si estas figuras serán suficientes para desplazar al PRI al tercer lugar en las elecciones de 2027.
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Recientemente, Citlali Calixto Jiménez, presidenta de la Jucopo del Congreso local, organizó una entrevista “en vivo” con tres comunicadores, que resultó ser pregrabada y editada para eliminar preguntas incómodas. Calixto justificó el uso de 108 millones de pesos, supuestamente para liquidar a trabajadores del Congreso, pero en realidad destinados a un bono de fin de legislatura para los diputados, mostrando prácticas que recuerdan al viejo PRI.
