Tras detención de más de 100 personas en Los Ángeles, líderes migrantes denuncian campaña de miedo y violaciones a derechos humanos.
La comunidad migrante guerrerense en Estados Unidos ha comenzado a organizarse para enfrentar una serie de redadas y operativos migratorios que, según denuncian, buscan infundir miedo entre los indocumentados. Así lo declaró Gaudencio Vélez Catalán, presidente de la Federación Binacional de Migrantes Guerrerenses, quien aseguró que los migrantes “ya no se quedarán callados”.
Redadas en Los Ángeles generan alarma
Durante los primeros días de junio, agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) realizaron múltiples redadas en lugares públicos como tiendas Home Depot y comercios de ropa en Los Ángeles. Al menos 118 personas fueron detenidas en estos operativos, lo que desató una serie de protestas en puntos clave de la ciudad, como el Fashion District y la zona de Westlake.
Manifestantes se congregaron frente a centros de detención federal para exigir la liberación de los detenidos. La tensión escaló cuando algunos participantes reportaron el uso de concreto lanzado contra autoridades, lo que llevó a la policía a dispersar a la multitud con gases lacrimógenos, balas de goma y granadas aturdidoras.
Comunidad guerrerense en alerta y organización
En entrevista telefónica, Vélez Catalán aseguró que la comunidad migrante guerrerense está en estado de alerta y se encuentra organizándose para protegerse. “Estamos viendo la verdadera cara de las autoridades, con operativos de la Guardia Nacional y violaciones sistemáticas a los derechos de los migrantes”, expresó.
Indicó que, aunque aún no se ha confirmado si entre los detenidos hay personas originarias de Guerrero, se tiene un registro preliminar de al menos 80 migrantes arrestados. “Estamos monitoreando minuto a minuto a través de grupos de WhatsApp y líneas directas. La información corre rápido, y eso es vital”, comentó.
Resistencia, redes de apoyo y rechazo estatal
El líder migrante también señaló que, a diferencia del pasado, ahora la comunidad está más organizada y preparada para enfrentar los embates. “No vamos a permitir que se lleven a nuestra gente sin responder. Ya no somos invisibles. Ahora nos defendemos”, dijo con firmeza.
Por otro lado, destacó que autoridades locales de California han expresado públicamente su rechazo a colaborar con redadas federales. “El gobernador afirmó que la policía estatal no colaborará con ICE, y eso nos da un poco más de tranquilidad”, agregó.
Llamado a la precaución y a la unidad
Vélez Catalán hizo un llamado a la comunidad migrante para actuar con cautela en los próximos días. Recomendó evitar lugares públicos, tener documentos a la mano y conocer sus derechos. “Si un oficial intenta detenerlos, no abran el vehículo sin una orden judicial. Estamos aquí para apoyarlos, y no vamos a dejar que se violen sus derechos”, concluyó.
Escrito por Juan Antonio Roman Morales