Este viernes, 29 de noviembre de 2024, miles de personas se congregaron en las principales ciudades de Italia para participar en una huelga general convocada por los sindicatos CGIL y UIL. La movilización tiene como objetivo protestar contra los Presupuestos Generales presentados por el Gobierno de Giorgia Meloni, que, según los manifestantes, son insuficientes para atender las necesidades del país.
Sectores afectados por la huelga
La huelga, que afecta tanto al sector público como al privado, incluye paros de 8 horas en diversas áreas y de 4 horas en el transporte público, aunque excluye al sector ferroviario. Según los sindicatos, la participación ha sido masiva, con más de 500,000 personas saliendo a las calles en todo el país. A pesar de esto, servicios esenciales como colegios y líneas de metro han mantenido su funcionamiento habitual.
El secretario general de la CGIL, Maurizio Landini, afirmó durante una marcha en Bolonia: “Más de 500,000 personas han decidido salir a las plazas de toda Italia para defender la libertad y los derechos”.
Reclamos de los manifestantes
Los sindicatos exigen cambios significativos en los Presupuestos para abordar problemas clave, como:
- Mayor financiamiento para la sanidad, la educación y los servicios públicos.
- Incremento del poder adquisitivo de salarios y pensiones.
- Inversiones en políticas industriales y la renovación de contratos laborales pendientes para 5 millones de trabajadores.
El gobierno de Meloni, que enfrenta una frágil situación financiera, aprobó un presupuesto con 24,000 millones de euros destinados a recortes de impuestos y aumentos en el gasto público. Sin embargo, los sindicatos consideran que estas medidas no resuelven los problemas estructurales del país.
Incidentes durante las manifestaciones
En ciudades como Roma, Florencia y Nápoles, se registraron concentraciones masivas. Por ejemplo, más de 70,000 personas se reunieron en Florencia, mientras que Nápoles contó con la participación de 30,000 manifestantes.
En Turín, al norte del país, se vivieron momentos de tensión cuando algunos manifestantes intentaron romper el cordón de seguridad, lo que llevó a enfrentamientos con la policía. Las autoridades respondieron con el uso de porras, mientras que los manifestantes reaccionaron con patadas y puñetazos.
Postura de la oposición
La líder del Partido Demócrata, Elly Schlein, se unió a las manifestaciones en Roma y criticó duramente los presupuestos del Gobierno:
“Es una huelga contra unos Presupuestos que recortan la salud pública y las escuelas, que incumplen promesas sobre pensiones y no invierten en el futuro del país.”
Contexto político y social
La huelga refleja el descontento generalizado hacia las políticas económicas de Meloni y marca un desafío importante para su gobierno. Mientras tanto, la movilización de los sindicatos y el respaldo de la oposición subrayan la creciente presión sobre la administración para atender las demandas sociales y laborales en un contexto económico incierto.