El sector inmobiliario chino comienza a mostrar signos de mejora después de años de dificultades económicas. El ministro de Vivienda, Ni Hong, declaró el domingo que la confianza en el mercado está mejorando. Este cambio se produce mientras China enfrenta presiones comerciales por parte de Estados Unidos.
Ni Hong, en una rueda de prensa celebrada en Pekín, señaló que desde principios de 2025 el mercado inmobiliario ha detenido su caída y muestra signos de estabilización. Sin embargo, el sector sigue enfrentando desafíos, ya que las ventas y nuevas construcciones han disminuido considerablemente en los últimos años.
En 2024, el sector vivió su mayor desplome histórico. La inversión y las ventas de viviendas cayeron significativamente, lo que afectó la economía en su conjunto. No obstante, los analistas de Nomura destacan que las cifras preliminares de 2025 son mejores de lo esperado en las principales ciudades de China.
Aunque los analistas anticipan que los precios seguirán cayendo este año, algunos esperan que el mercado se recupere gradualmente en los próximos años. El precio medio de las viviendas ha disminuido entre un 20% y un 30% desde su máximo en 2021, lo que ha generado una crisis de liquidez y desconfianza entre los compradores.
A pesar de estos desafíos, la estabilización del mercado podría tener un efecto positivo en la economía china. Dado que el 70% de la riqueza de los hogares está en bienes raíces, una recuperación del sector podría ayudar a mitigar los efectos de los aranceles comerciales de Estados Unidos.
El futuro del sector sigue siendo incierto, pero las señales actuales ofrecen esperanza para los próximos meses.