El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha mostrado una evolución favorable en su recuperación tras la cirugía intracraneal a la que fue sometido el pasado martes, 10 de diciembre de 2024. Según el último boletín médico del Hospital Sirio-Libanés, Lula, de 79 años, fue trasladado este viernes a cuidados semi intensivos.
El informe médico indicó que el mandatario está “lúcido y orientado”, además de haber retomado una alimentación normal y realizar caminatas por los pasillos del hospital.
Detalles sobre la cirugía y su evolución
Lula fue intervenido quirúrgicamente para tratar un hematoma cerca del cerebro, provocado por una caída sufrida hace dos meses en la residencia presidencial de Brasilia. Dos días después, se sometió a un cateterismo como medida preventiva para minimizar riesgos de sangrados futuros.
De acuerdo con sus médicos, el presidente no sufrió secuelas neurológicas tras las intervenciones. El neurocirujano Marcos Stavale aseguró:
“Está neurológicamente perfecto. Lula está óptimo y en excelente recuperación.”
Aunque los especialistas prevén que pueda retomar sus funciones en el Palacio de Planalto la próxima semana, le recomendaron mantener un ritmo de trabajo moderado durante el proceso de recuperación.
Monitoreo menos invasivo y próximas etapas
Una fuente de la presidencia informó que, aunque Lula permanecerá en la unidad de terapia intensiva (UTI), el monitoreo constante ha sido reducido debido a su positiva evolución.
“El monitoreo ahora se realiza en intervalos, lo que refleja el progreso del cuadro clínico“, señaló la fuente.
Con su salud en constante mejora, el mandatario se prepara para retomar paulatinamente sus labores oficiales, siguiendo las indicaciones médicas para asegurar una recuperación completa.
